La instalación de un laboratorio es trabajo más probablemente de  arquitectos e ingenieros, pero el personal que eventualmente labore tendrá que tomar decisiones para evitar discrepancias dentro de un largo periodo de tiempo, alrededor de 10 a 20 años.

Las intervenciones del personal serán para tener una mayor familiarización con equipo de laboratorio y para que el trabajo sea eficaz y seguro.

 Para el diseño de laboratorio, en especial de control de alimentos, donde se puedan desempeñar distintas funciones como análisis de alimentos para determinar componentes, oligometales, aditivos, sustancias tóxicas entre otros, se deberá tomar en cuenta la distancia para recorrer dentro del laboratorio, ya que hay que tener presente que debe ser lo más corta posible para evitar eventos inseguros. Se evitará que el diseño no tome en cuenta todos los pormenores actuales de cada actividad prevista, para prescindir el rediseño del laboratorio e interrumpir estudios y análisis de un futuro.

 Hay argumentos a favor del diseño del laboratorio en función de sus actividades “genéricas” y “especializadas”. Las actividades genéricas son las operaciones químicas por “vía húmeda” que disponen de un gran número de bancos fijos dotados de agua, electricidad, sumideros, estanterías para reactivos, a diferencia de las “salas de instrumentos”, donde es necesario menos servicio analítico y basta con mesas y bancos móviles.

 Por parte de las áreas especializadas, hay que ser cuidadosos en los estudios de análisis de aire donde el aire del laboratorio tiene que estar totalmente aséptico para evitar una contaminación cruzada como en el caso de molturación, mezcla o agitación aunado con analitos heterogéneos por sus efectos toxígenos.

 Los parámetros del diseño son relacionados con una identificación asertiva de lo que se necesita en cada actividad especializada además de estimar la necesidad relativa en actividades genéricas tanto por vía húmeda o de sala de instrumentos.

 Está desaconsejado actividades tales como comer, beber y fumar dentro de los laboratorios, para evitar contaminación. Por seguridad en el laboratorio debe diseñarse una zona separada para este fin y facilitar al personal una vía rápida de evacuación en caso de incendio o emergencia. Al  menos tener dos entradas y salidas en cada habitación hecha.

 En cuanto a la garantía de la calidad, el diseño debe ser acorde a toda necesidad del personal para evitar el incumplimiento de los plazos y el incremento de los costos por esfuerzos inútiles. Uno de los mayores problemas es la acumulación de polvo y para esto se recomienda el uso de estanterías con puertas de cristal para reactivos, y la encimera del banco de trabajo se mantendrá libre de aparatos fijos. La limpieza será constante y con paños absorbentes,  evitar usar métodos tradicionales de limpieza como la escoba ya que solo extienden más la contaminación.

 El control de la temperatura, la humedad y el polvo es la clave para el análisis químico de cualquier procedimiento tanto en el equipo electrónico como en los muebles. Los materiales de ensayo, reactivos y patrones también tendrán un cuidado especial y deberán almacenarse en condiciones reguladas.

Sin duda alguna todo lo anterior tiene que estar documentado, para tener un buen sistema de garantía. Hay que constatar que el equipo está en condiciones reguladas, que los controles de temperatura, humedad y luz son adecuados para el personal y equipo y que existe un registro de todo resultado de muestra ambiental del laboratorio.

 Por último y no menos importante consideración, habrá un control de limpieza donde se precise las obligaciones del personal en relación con las superficies verticales (armarios, paredes, ventanas, puertas) y horizontales (estanterías, mesas) equipo, interior de refrigeradores, campanas de humos, además del control del contenido en cada equipo, comprobando la función del equipo de acondicionamiento de aire y extracción de polvo. El programa de garantía se basará en resumen por registros de observaciones y de medidas necesarias y adoptadas que incluyan las operaciones de limpieza del laboratorio.