El diseño de laboratorio es una especialización que ha dejado de ser una tendencia para convertirse en un proceso básico de su configuración.

El laboratorio está conformado por las instalaciones, aparatos, materiales y por supuesto, por el personal.

Aquí se obtienen productos, ensayos y análisis físicos, químicos y microbiológicos. Así que desde las vitrinas de laboratorio hasta los materiales para laboratorio deben ser minuciosamente elegidos y procesados.

El proyecto de creación o renovación debe considerar seguridad y presupuesto para optimizar lo invertido. Además de cumplir con las normas vigentes, el diseño debe partir de la funcionalidad.

En su configuración conviene considerar:

Resistencia. Tanto al fuego como a las sustancias con las que se trabaja, las instalaciones deben tener un alto nivel de resistencia.

Especificaciones. ¿A qué va a dedicarse el laboratorio? ¿Qué tipo de industria trabaja? ¿Cuántas personas integrarán el equipo? Esas son algunas de las preguntas que debemos hacernos.

Seguridad. Los productos almacenados, el ambiente, ventilación y temperatura, son algunos de los factores que componen la seguridad. El flujo de gases y vapores nocivos para la salud tiene que manejarse a través de un sistema de extracción.

Si el laboratorio está en la planta baja de un edificio, la inversión para el sistema de extracción es mayor, pero se compensa, pues facilita la evacuación, refaccionamiento y eliminación de otros residuos.

La temperatura generalmente debe rondar los 18 grados centígrados con una humedad no mayor al 80 por ciento.

En lo que respecta a la iluminación es frecuente la duda sobre “cómo equipo mi laboratorio”, para lo cual no hay una respuesta universal, pero se debe explotar al máximo la luz natural.  En las áreas críticas la luz debe ser blanda, pero un factor importante es que la instalación eléctrica no interfiera en absoluto con las actividades.

La presión es otro factor esencial, pues hay algunos que requieren tener áreas presurizadas para trabajar libres de polvos o productos.

Instalación de servicios:

Gas. Generalmente se usan tubos de cobre pintados de amarillo, separados de la conducción eléctrica por lo menos 30 cm. Los contenedores se instalan afuera.

Agua. La tubería debe ser de hierro o PVC para resistir la corrosión. Se pinta de verde.

Electricidad. El control central va a la entrada del laboratorio con diferenciales o magnetotérmicos para iluminación, enchufes y aparatos. El sistema de protección se diferencia así: negro 220V, rojo 380V, amarillo 110V.

Si hablamos de vitrinas, las hay de sobresuelo, convencionales y sobremesa. Cada una tiene un propósito y debe respetar los parámetros arriba citados para su montaje.