El azúcar en la rama de ciencias de la vida, en tiempos prehistóricos fue considerado como el oro de la actualidad. Por su sabor y liberación de numerosas hormonas que generan que nuestro organismo crea una adicción a ella

 Desgraciadamente, su sabor es directamente proporcional a sus efectos adversos y morbilidades que puede causar afectando de manera considerable a la salud.

 La mayoría de los alimentos que consumimos actualmente están condicionados por carbohidratos, principalmente de azúcar. En 1900 un individuo común consumía 90 libras de azúcar por año, en el 2012 el 50% de la población norteamericana consume media libra por día, es decir, 180 libras de azúcar por año. Esto demuestra la alta prevalencia de diabetes a partir de hace diez años donde 8,000 de cada 100,000 han sido diagnosticados con diabetes.

 La obesidad infantil como una de las complicaciones de las estadísticas previamente vistas, es una condición para alertar a la población, en el caso de México, es el primer lugar a nivel mundial. Tomando en cuenta que el síndrome metabólico, es el conjunto de alteraciones metabólicas como resistencia a la insulina, hipertrigliceridemia, hipertensión, hígado graso y aumento de la circunferencia de cintura a causa de dicha obesidad infantil, donde no existen datos certeros pero un descubrimiento científico revela que en el estado de Nuevo Leon un 50% de los niños con obesidad infantil, padecen de éste síndrome. Todo gracias a la alta ingesta de glucosa diariamente.

 En otrascondiciones mortales tales como el cáncer además del mecanismo anaeróbico que se exhibe en cualquier clase de éste, resulta que la glucosa es su alimento favorito. Todo tipo de azúcar, hablando de azúcar glass, morena, suplementos, sustitutos, son malignos para nuestro organismo. ¿Por qué? Toda la comida contiene su debido monto de glucosa y es innecesario una sobredosis de ésta. La vía metabólica de la glucosa ayuda a que además del cáncer, enfermedades infecciosas,  se compliquen. Por lo que se recomienda evitar sustitutos, suplementos, azúcar extra en nuestros alimentos para prevenir enfermedades metabólicas que pueden condicionar por mucho tiempo nuestra calidad de vida.